ya no tendremos que hablar del temblor
no me acuerdo si sonó la alarma antes o después ni me acuerdo realmente haber escuchado la alarma pero sentà la tierra moverse y no sabÃa si era una broma ni quién bromeaba. las autoridades? los estados unidos? dios? grité fuck o carajo o caralho, ya ni sé, y el piso se seguÃa moviendo. busqué al gato pero ya se habÃa escondido, abrà la puerta y los autos de la cochera se movÃan y cuando llegué a la calle nada más se movÃa. me senté en el sillón y usé el internet como si fueran los últimos gigas que me quedaban sin saber que asà era. se fue la luz, se fue la comunicación. 40 minutos pasaron desde que tembló y solo habÃa una palomita en whatsapp, pero entonces llegaste. traÃas unos ojos gigantes y me contaste que se habÃa caÃdo un edificio sobre patricio sanz y que te habÃas agarrado a piñas con un señor en el semáforo de monterrey. te abracé y nos acostamos un rato, ¿a celebrar que estábamos vivos quizás?
los siguientes dÃas fueron difÃciles.
este domingo sonó la alarma y salà corriendo a la calle y me acordé de todas las cosas que sucedieron desde el 19 de septiembre hasta el 20 de mayo;
pero ese dÃa, por media hora, nos acostamos en la cama y celebramos la vida.
los siguientes dÃas fueron difÃciles.
este domingo sonó la alarma y salà corriendo a la calle y me acordé de todas las cosas que sucedieron desde el 19 de septiembre hasta el 20 de mayo;
pero ese dÃa, por media hora, nos acostamos en la cama y celebramos la vida.
Comentários
Postar um comentário